Valencia Ambi

Macizos y de cuerpos torneados,
de anteojos, intelectuales.
Prendas ajustadas,
chaquetas de cuero;
así como en las revistas,
con el pelo engominado
y mirada encantadora.

De esos que salen en la tele,
que hacían suspirar a mi mamá
mientras tocaba con su dedo húmedo la plancha.

De bigotes espesos y cejas pobladas,
mentones cincelados,
Labios voluptuosos.

Esa maldita selección natural,
una mezcla de dietas y cremas
para alzar las tetas y afirmar el culo;
toda una vida aspirando a ser Yayita,
a dejar al resto en Plop.

Y en esos encuentros casuales,
me enfrento a una majestuosa forma de vida;
corpulento,
de barba pulida,
amoroso,romántico y sensual,
con aroma a frutas;
y al bajar su bragueta,
me encuentro con una selva pasional,
unos 15 centímetros bien formados.

Sólo fue tomarlo con mi mano para recordar,
que hace mucho,
Dejó de gustarme el pipí

Arnold “Elefante Diverso”.