Vinieron las palabras
como cuchillos de afiladas hojas,
con la excusa irrefutable de la verdad;
verdad dolorosa, que hace sangrar el corazón.
Ella se viste de trasparente…
¿Cómo poder negarla?
y no por gritarla se hace más verdad,
o menos falsedad.
Te la pones a diario así no te convine,
está pegada a la piel,
reflejada en las risas y susurros ajenos;
está pegada a la frustración,
y se convierte en castigo…
Por eso,
hoy prefiero a los inanimados…
sus silencios no hieren.
Lulú "La Mariposa"

Te estoy soñando
ResponderEliminarsoñando.
Y sólo eso.
Para más,
no,
no hay fuerza.
Desde que no tengas pesadillas, será perfecto que me sueñes..
ResponderEliminarSiga caminando..
Lulú "La Mariposa"